Clasificación Crueles
Había una vez un niño pobre que iba caminando y toca la puerta de una casa y sale una señora, y él le dice: Señora, me podría regalar un vaso de leche y un pedazo de pastel, la señora enojada le responde: No, y lárgate de aquí. El niño se va y toca otra puerta, sale una niña y le dice: Amiguita me podrías regalar un vaso de leche y un pedazo de pastel, y la niña le dice: Oye que ustedes no piden un vaso de agua y un pedazo de tortilla vieja. El niño responde: Si, ¡solo que ahora es mi cumpleaños!
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