Entra un tipo en una librería y le dice al dependiente:
-¿Me da un libro para hacer amigos cacho hijo de puta?
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Se aproximaban las competencias olímpicas de Barcelona, y el Perú no poseía un representante de natación, el profesor encargado de esa disciplina seleccionaba gente, pero ninguno era apto o lograba poder llegar a una marca decorosa.
De repente llega un hombre alto con un cuerpo atlético con un hombre mutilado (sin piernas ni brazos), el hombre alto y atlético lanza al agua al mutilado y el señor empieza a nadar con tal velocidad que el profesor no lo podía creer.
Ya en las olimpiadas el representante de Perú empezó su carrera demoledora, ningún contrincante podía vencerlo, en los 100mts, medalla de oro, en estilo mariposa medalla de oro, en estilo espalda medalla de oro, cuando llego la prueba final de los 5000mts, el nadador mutilado se despunto y faltando 100mts para llegar a la meta se hundió, la gente salto a salvarlo, y cuando lo sacaron el profesor le pregunta ¿hermano que paso? Y el mutilado le responde me dio calambre.
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Un gordo tan gordo que como será de gordo que cada vez que va al baño el que puja es el water (excusado).
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Un judío, con la mejor de las intenciones, había enviado a su hijo al colegio más caro de la colectividad judía, el Tarbut, pero pese a sus intentos, Samuel no daba pie con bola.
Boletín del primer mes: matemáticas 2; geografía 6; historia 4; literatura 2; conducta 0.
Estas espantosas calificaciones se repetían mes a mes, hasta que el papá se cansó, y le dijo a su hijo: Samuel, escúchame bien lo que te voy a decir: si el próximo mes tus calificaciones y tu comportamiento no mejoran, voy a tener que pasar por la vergüenza de tener que mandarte a estudiar a un colegio católico.
Al mes siguiente las notas de Samuel fueron una tragedia sólo comparable a la destrucción del templo. El padre, consecuente con su palabra, a través de un rabino cercano a la familia, se conectó con un obispo que le recomendó un buen colegio de franciscanos, al cual envió a Samuel sin dilación.
Boletín del primer mes: matemáticas 9; geografía 8; historia 9, literatura 10, conducta 10.
Segundo boletín: matemáticas 10; geografía 9; historia 10; literatura 10; conducta 10.
El padre, ahora orgulloso, visita a Samuel y le dice: Samuel, estoy muy satisfecho que te vaya tan bien en la escuela, ¿cómo ha sucedido este milagro?".
Nada, papá, le contesta Samuel: lo que pasa es que después que me presentaron a todos los compañeros y a los profesores, fuimos a la iglesia, y cuando entré, vi la imagen de un señor sobre una cruz, con clavos en las manos y en los pies, todo ensangrentado y con cara de haber sufrido mucho, y pensé que si a ése le hicieron eso por no saber sumar, mejor me acomodo porque en este colegio no se andan con pendejadas ...
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